Todos hemos hecho dieta alguna vez, es un hecho. Seguro que hay algún estudio estadístico de esos super chachis por alguna parte que me de la razón. De la universidad de Massachusetts como mínimo, que esos siempre sacan estudios famosos. Seas hombre o mujer, en algún momento has decidido que era hora de cuidarte un poquito y bajar los kilos de más. O a lo mejor no era por salud y solo era por verte tú mismo mejor.
En mi caso, siempre ha sido por las dos razones. Quizá, años atrás, era más por verme mejor que por salud, pero desde que entré en la carrera y empecé a adquirir conciencia de la salud, y de la mía propia especialmente, mi meta es bajar los kilos que sobran por motivos de salud (a ver, y que verse estupenda también está muy bien, siempre dentro de los términos de la SALUD. Nada de tallas minúsculas si no son tu talla real).
El problema es que mi madre y yo (porque siempre las hacemos las dos, somos muy parecidas) ya hemos probado como medio millón de dietas distintas (incluso llegamos a hacer la Dukan poco antes de que empezase a ponerse de moda por la tele y demás. Menos mal que pronto yo empecé a encontrarme mal, me documenté bien sobre los efectos de demasiada proteína, y la dejamos inmediatamente). Al principio perdíamos con todas (entiéndase principio por primer mes, que no todas hacen efecto a la primera semana), pero conforme pasaba el tiempo, parecía que nuestro organismo perdía capacidad de reacción a esa dieta. La explicación es sencilla: para que nos entendamos, el cuerpo se acostumbra a esa dieta, y no baja del peso que se haya alcanzado. Literalmente, se acostumbra a funcionar con esas calorías que le metes.
Añadid a eso que muchas son muy restrictivas y crean una gran ansiedad, y que mucha gente somos de dulce, y aquello no va ni para adelante ni para atrás.
Bueno, pues ya estamos a dieta otra vez. Después del verano ya se sabe lo que pasa, aunque yo personalmente este verano no le he tirado apenas a los helados y los dulces, pero claro, el sedentarismo es lo que tiene.
En este caso, me encontré por internet (no recuerdo muy bien cómo) con la dieta Weight Watchers, o como la conoce mucha gente, "la dieta de los puntos". Antes de precipitarme, busqué bien en qué consistía, y no le vi peligro ninguno, porque básicamente puedes comer absolutamente de todo, eso sí, con moderación. Y la moderación es a base de Propoints.
Esta dieta, en España llamada
Entulínea, es más un estilo de vida, de "comer", que una dieta realmente. Básicamente, según tu peso y altura, tienes unos propoints al día que debes gastar, y un extra semanal. Por ejemplo, en mi caso, tengo
26 pp al día, y un
extra de 49. ¿Qué quiere decir esto? Que al día me las puedo ingeniar como me de la gana, pero debo agotar esos 26 pp, ni uno menos. ¿Y más puedes agotar? Pues sí, sin problema, pero los restas de los 49 del extra.
También hay otra forma que es lo que se llama DAS (días a saciedad). Consiste básicamente en comer todo lo que te de la gana sin contar puntos siempre que lo que consumas sean alimentos a saciedad (en el libro vienen marcados en verde, en otros vienen en amarillo). Yo personalmente prefiero lo de los 26, porque puedo comer lo que me de la gana.
Nosotras no estamos apuntadas al programa, porque supone soltar la mosca todos los meses y tal, aunque hay gente que lo considera por la parte de los grupos de apoyo y esas cosas. Nosotras compramos uno de los libros, el de las recetas, y con ese y el magnífico internet nos apañamos estupendamente.
Un par de cosillas que debéis saber para hacerla, además de lo del capital diario y el extra semanal, es que hay una serie de "reglas":
- No puedes quedarte corto con el capital diario. Si son 26, son 26. NI UNO MENOS. Aquí podéis calcular el vuestro.
- Hay que tomar las 5 raciones de fruta y verdura al día. Frutas y verduras, en su inmensa mayoría, son 0 pp, Así que escusas las justas, señores.
- Deben consumirse 3 raciones de lácteos, en la modalidad que queráis. Pero hay que consumirlos y punto.
- Con las mismas, hay que consumir 2 de grasas, entendiéndose por esto las cucharaditas de aceite y margarina. No os vayáis a pensar "ale, me como dos bollos de chocolate al día".
- El agua es buena para ti, para tu cuerpo, y para todo. A beber entre litro y medio y dos litros al día. No solo estando a dieta, si no de costumbre. Cuestión de salud, amigos.
- Es recomendable hacer algo de ejercicio. No os digo que os vayáis a correr la maratón. Con 30 minutetes de ejercicio diario del tipo que sea, vale.
Ya llevamos una semana con este estilo de "comer", y yo he perdido 1 kg 300 gramos. Pero agarraos, porque esta semana he comido: una tarde, un gofre de esos de Burger King; un día, comimos en Burger King; he estado desayunando estos últimos días una magdalena de las que hice con la receta que vienen en el libro; trozos de tarta MariPepa que hizo mi madre por el cumpleaños de mi hermano... La clave del asunto es luego ajustar el resto de las comidas del día, restar de los extra si te ves apurado ese día o si te apetece un capricho.
Las recetas que vienen en el libro están de vicio, esa es otra. No son de estas comidas típicas de dieta que es ver el plato y deprimirte entera. Nope. Si os gusta comer de todo un poco (hay mucha verdura, porque la verdura son 0 pp), problema ninguno con esta dieta.
También he de añadir que además, tomo 3 veces al día (a veces 2 si no me acuerdo) Garcinia cambogia (si, la plantita de moda), o sea que puede que haya contribuido a la pérdida de peso. Mi madre dejó de tomarla, por lo que en cuanto sepa cuánto ha perdido ella esta semana, os diré si hay mucha diferencia tomándola o no (que yo entiendo que estar comprando las pastillas constamente en el herbolario toca la moral. Y el bolsillo).
Hablemos de bolsillos, esa otra cosa buena de la dieta Weight Watchers. Esta "dieta" no es cara, para nada. ¿A qué me refiero? Que son alimentos de toda la vida, no hay que andar comprando cosas raras, y si sois unos cuantos en casa y no todos vais a hacerla, el bolsillo no se resiente como con otras (ya sabéis, eso de comprar pechuga y verduras para los que están haciendo la dieta, y otro tipo de alimentos para los que no. Eso en el menú día a día se nota en la compra).
Así que me leeréis hablar de esta dieta mucho en el blog, ahora que le voy a dedicar más tiempo a mi blog personal.
¿No queréis compraros los libros?
Colgaré recetas del libro modificadas por mí, con su cantidad de propoints, recetas que hayamos hecho nosotras calculando los propoints (eso ya es más puñetero, la verdad), y esas cosas. Podemos hacer nuestro pequeño grupo de apoyo. Y además está internet, ya sabéis. Hay mucha gente que se lo curra y sube recetas y archivos.
Aquí un archivo con los puntos de los alimentos y demás.
See ya, people, que me voy a cenar tomates rellenos.
Crispy